Rompiendo el mayor estereotipo de la ciencia ficción, “Viaje fantástico” (1966) describe un emocionante viaje espacial… pero no al espacio exterior, sino al espacio interior.
Odisea en el cuerpo humano
Cuando un importante científico es víctima de un atentado y sufre un trauma cerebral, sus colegas emplean una tecnología experimental para tratar de salvarlo. Mediante un proceso de miniaturización, los tripulantes del submarino Proteus son reducidos a un tamaño microscópico y luego inyectados a una arteria del paciente. Rumbo a la zona del cerebro, los exploradores enfrentan el ataque de bacterias, anticuerpos y otros peligros, mientras descubren los misterios asombrosos de lo infinitamente pequeño.
Decorados formidables
Con su lujosa puesta en escena y decorados formidables, que recrean regiones enteras del cuerpo humano, esta maravillosa película sorprende, emociona y divierte, sin importar sus ingenuidades ocasionales.
Dirigida con creatividad y profesionalismo por Richard Fleischer, “Viaje fantástico” es todo un clásico en su género; y todavía mantiene su capacidad de cautivar.
Ganó dos premios Oscar: mejores escenografías y efectos visuales.
Ilustre adaptación literaria
En setiembre de 1966, coincidiendo con el estreno de la película, el gran escritor Isaac Asimov publicó un notable ejemplo de “novelización”, o libro basado en un guión cinematográfico original. Asimov además, escribió una secuela, “Viaje fantástico II: Destino el cerebro”, que nunca fue llevada al cine.
Refrito no oficial
En 1987, Joe Dante rindió homenaje a la película de Fleischer dirigiendo una sabrosa comedia futurista, con mucha acción y una pizca de romance, a medio camino entre parodia, secuela y refrito no oficial: “Viaje insólito” (Innerspace), con Dennis Quaid, Meg Ryan y Martin Short. ¡Recomendada!
Viaje fantástico
“Fantastic Voyage” (EE.UU. 1966) de Richard Fleischer. Con Stephen Boyd, Raquel Welch, Edmond O’Brien, Donald Pleasence
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